en el café

...te coloqué en la mesa y me senté en el sillon que esta en la cocina, porque es más cómodo sentarse en el sillón y el frio que hace en las mañanas se siente menos cuando me siento ahi; viendo hacia ti, como esperando tu respuesta, no como cuando "reclamas" una respuesta, más bien como cuando te gustaria que hubiera una. Por qué hoy debía de ser diferente, por qué hoy dirias todas esas cosas que espero oir, todas las respuestas que quisiera tener?

Seguí viendote, tratando de escuchar, de captar lo que no he visto, imaginando un poco lo que será y lo que vendrá. Me contabas lo que puede ser, entre bocanadas de vapor me enseñabas divertida lo que pasará y me contaste uno que otro secreto, de posibilidades que sí son posibles, si en realidad lo creía y me proponía a hacerlas realidad, de vuelos y de sueños y de sonrisas que existen si quieres que existan y que esperan a ser encontradas.

Y ya entre sonrisas me dijiste que no fuera tonto, que dejara de verte tan fijamente como lo hacia, que viera atras de ti, que durante toda la platica no me habia dado cuenta que desde ahi se podia ver en donde estaba eso que queria, que no iba a ser facil, que nada que valiera la pena lo era, me dijiste que me pusiera mis lentes por que sabes bien que mi vista no es tan buena, y los necesito para ver de lejos. Te tomé de nuevo sin dejar de ver y de pensar lo que me dijiste, puse musiquita y te tomé... por que no conozco otra forma de empezar el dia